Complicada papeleta la que tiene el Club Balonmano Benidorm en el partido de vuelta de la tercera eliminatoria de la Copa del Rey frente al Bidasoa Irún. Pero esa dificultad se afronta con mucha ilusión desde dentro del vestuario, con ganas de intentar la remontada.
El pasado miércoles se disputaba en Irún el partido de ida de esta eliminatoria, y el resulto final de 33 a 26 deja poco margen a los benidormenses. Un equipo muy férreo en defensa y con grandes jugadores que le permiten desarrollar un juego muy rápido y fluido en ataque hacen que estemos hablando de una misión casi imposible, pero mientras hay vida hay esperanza, y los de Fernando Latorre seguro que van a intentar poner las cosas complicadas al rival e intentar aprovechar las ocasiones que puedan surgir.
En un principio el equipo contará con la segura baja de José Mario Carrillo, y presenta la duda de Álvaro Ruiz con un golpe en la espalda.
Fernando Latorre comentaba en la previa que: “tenemos un partido complicado con una renta de goles importante para ellos, tenemos una eliminatoria muy difícil, pero no es imposible. No saldremos derrotados y tiene que servirnos para recuperar sensaciones de cara a la puerta contraria, y si nos sale un buen partido intentaremos soñar”.
El choque se disputará a las 20:00 en el Palau d’Esports l’Illa de Benidorm y será dirigido por la pareja catalana Florenza Virgili y Ausas Busquets.