El equipo de balonmano de la localidad alicantina se hizo con el oro en el Nacional juvenil siendo la tercera medalla de una generación increíble.
Este pasado fin de semana, Torrevieja y su equipo de balonmano volvieron a hacer historia. El Club Balonmano Mare Nostrum Torrevieja se hizo con la medalla de oro en las finales del Campeonato de España juvenil imponiéndose en el partido definitivo al BM Pozuelo (22-14). Además, venció impulsado por un público que le acompañó desde el principio ya que se organizó en la localidad alicantina.
Con esa medalla, el equipo de Torrevieja ponía la guinda a una generación de jugadoras tremendamente potente: una medalla de bronce en la categoría infantil, otra medalla de oro en la categoría cadete y el último metal también de oro.
Pasados unos días de la euforia y la felicidad, que se han instaurado y de qué manera en Torrevieja, en YoSoyNoticia.es hablamos con Susana Fraile. La entrenadora del CBM Mare Nostrum Torrevieja repasa cómo se vivieron los históricos días y, sobre todo, cómo es una generación tan competitiva y especial como la de este grupo de apasionadas por el balonmano.
“Visto desde la distancia se reconoce la magnitud de lo que han conseguido estas chicas”
Analizar las cosas con perspectiva siempre es más positivo. La dulce resaca permite disfrutar mucho más de los éxitos, aunque parezca imposible repetir los momentos que genera ese bocinazo final que te convierte en campeón. Pero así es el trabajo en el CBM Mare Nostrum Torrevieja: con calma, con sabor a futuro y con perspectiva.
Por eso, Susana Fraile ensalza todo lo que se vivió con la medalla de oro: «Mirándolo desde la distancia es cuando ves la magnitud de lo que han conseguido estas jugadoras. Hay que pensar que no solo es este Nacional de categoría juvenil, que ya es casi balonmano de verdad. Este grupo también se ha llevado el oro en cadete y el bronce en infantil. Eso dice mucho del trabajo que se ha desarrollado durante todo este tiempo».
Tres medallas en tres categorías diferentes que ponen en valor ese camino recorrido: «Es el reconocimiento a todo el trabajo de cantera, del buen hacer durante todos estos años. A veces haces las cosas muy bien y trabajas mucho, pero no llegan los resultados que pueden convertirse en premios. Y estas medallas visibilizan todo el esfuerzo«.
Los pilares de una generación de oro
Con la disputa del torneo juvenil, el CBM Mare Nostrum Torrevieja pone la guinda a una generación que ha ido creciendo campeonato tras campeonato en base a varios factores fundamentales que se han trasladado a la pista.
Así lo reconoce Fraile: «Trabajo, compromiso, constancia, creencia… Hemos ido trabajando y han ido apareciendo las oportunidades en cada una de las categorías que íbamos disputando y asumíamos esos pequeños retos que aparecían. Creíamos que podíamos y nos sentíamos capaces, pero siempre con el compromiso por delante. Al fin y al cabo, las jugadoras han tenido que organizarse sus estudios, sus horarios de entrenamientos…».
Todos estos pilares han convertido al CBM Mare Nostrum Torrevieja en un equipo competitivo: «Han aprendido a competir y esa es la clave de todo. Han llegado a disfrutar de un nivel competitivo alto y cada vez que superábamos una fase, ese nivel subía. Han logrado llegar a un altísimo nivel competitivo y encima se lo han pasado bien haciéndolo«.
“Se ha visto el buen hacer de la Comunitat Valenciana”
Una de las noticias más importantes en relación a todo lo vivido con los Campeonatos de España es que la Comunitat Valenciana ha sido sede de tres de ellos. Torrevieja, Elda y Alicante fueron las ciudades organizadoras de torneos de índole nacional, algo que sin duda también pone en valor el día a día de la federación de balonmano.
También lo ve así Susana Fraile: «Es otro premio al buen hacer que se lleva viviendo en la Comunitat Valenciana. Siempre hemos sido referencia a nivel de base y también en la máxima categoría. Esto es otro premio y nos ayuda a dar mayor visibilidad».
Además, el CBM Mare Nostrum Torrevieja pudo celebrar el título con su gente: «La respuesta ha sido increíble siempre, pero ahora ha sido más especial por las circunstancias. Veníamos casi de jugar sin público y ha venido mucha gente a apoyarnos. Las jugadoras saben que la gente viene a impulsarnos, no a juzgarnos. Además, el nivel organizativo ha sido excelente».